Tarjetas para nuestras madres, (Día de la madre 2009, IV Parte)

Hoy por fin puede publicar estas tarjetas, no lo había podido hacer antes, pues no había tenido la ocasión de ver a mi mamá en forma directa, los saludos del día de la madre sólo se hicieron a través de la vía telefónica, y también en forma virtual, ya que en mi labor de madre, estuve cuidando de mis hijos, pues uno de los mellizos amaneció enfermo ese día, llegando incluso a pensar que era peste (menos mal que no fue así, pues hubiese tenido que decir literalmente ¡Que día más apestoso!). Así es que como precaución decidimos no salir con ellos
Al final, que con los cuidados preventivos, se recuperó y ahora gozan los tres de buena salud. Sin embargo, ahora hay que cuidarlos de virus y enfermedades que andan en el ambiente, así es que no hemos salido de casa en mucho tiempo con ellos.

Los presentes que les obsequiamos a cada mamá son exactamente iguales, son dos tarjetas y dos sobres, trabajados con papel vegetal; la única diferencia es que uno de los sobres tiene un detalle a la izquierda, y el otro a la derecha. El resto es todo con el mismo patrón de trabajo (los mismos colores, los mismos diseños y tamaños para ambas mamás).

A estos trabajos, se le agregó el escrito que publiqué en el blog en vísperas del día de las madres, es decir, el día 9 de mayo, pero esta vez lo imprimí con una imágen de fondo en la que aparece una madre con un bebé en brazos. El resultado me gustó mucho, y creo que a las mamás también.

Al interior de cada tarjeta, le coloqué un escrito con una dedicatoria para cada mamá.

Para la confección de estos trabajos, se utilizaron diferentes técnicas, como por ejemplo, aplicación de flores y cintas, calados con técnicas de estilo brasilero, y algunos pequeños detalles repujados.
Estos trabajos fueron pintados con tinta perlescente de color rosa pálido. Las cintas utilizadas corresponden a cintas de género, y también agregué en cada tarjeta una flor aplicada pintada muy suavemente, con lápices policromos. El papel de fondo es papel hilado, siguiendo con la tonalidad de rosa pálido, para darle un aspecto más delicado y femenino a los trabajos.
Las tarjetas fueron recortadas con pinche calador de una aguja, mientras que los sobres fueron recortados en sus bordes con tijeras tradicionales.