22 de noviembre de 2011

Abanico de Onomástico para mi hija mayor

Hoy, en el día de Santa Cecilia, he querido obsequiarle este abanico de calas a mi hija mayor, en honor a su segundo nombre.  Se lo entregamos con sus hermanitos mellizos al momento en que llegó de la escuela, y fue para ella una gran sorpresa, le encantó, pues le encantan las flores y los abanicos.

Por la tarde, tuvimos una gran sorpresa, pues nos visitaron mis papás y pasamos una tarde muy agradable junto a ellos.  Así es que la pasamos muy bien en el día de nuestro onomástico, y en honor a la patrona de nuestro nombre, nos dedicamos a escuchar y a disfrutar de buena música.  

 Para la confección de este abanico utilicé un papel vegetal de mayor grosor, es por esta razón que los pliegues y los detalles repujados se pueden apreciar con mayor claridad, pues el trabajo queda muy bien terminado con un papel de mayor gramaje.

Para su confección utilicé lápiz de tinta blanco en los contornos y los pliegues, y luego un repujador de bolita muy fina.  Poteriormente lo recorté completamente con tijeras, después viene el plizado y luego le adherí estas calas que son de tela.  Para finalizar, le agregué un moño de cinta en tono damasco muy suave.

Abanico de obsequio para la tía Fonoaudióloga

Hoy también se celebra el día del fonoaudiólogo, así es que le hice este abanico a la profesora de la Escuela de Lenguaje a la que asiste mi  hijo mellizo.   Se trata de un abanico hecho de igual  manera que el anterior, pero con flores de tela enn tono rojo muy encendido, también le agruegué unas hileras de perlitas de fantasía y un pergamino con el nombre de la tía.  En la parte inferior le até un lazo de cinta de color rojo.  Y colgando una pequeña tarjeta de cartulina texturada escrita en color dorado y recortada con tijeras de borde con diseño.